Sumérgete en la historia y las tradiciones culinarias de Misiones con la deliciosa Torta Ruso-Alemana, un legado vivo de los primeros inmigrantes. Clara Sobotka, nieta de colonos rusos-alemanes, licenciada en turismo y apasionada cocinera, nos comparte esta receta familiar que ha perdurado a través de generaciones.
Descubre cómo un simple postre puede convertirse en un puente entre el pasado y el presente, y cómo la gastronomía tradicional sigue siendo el alma de nuestra identidad cultural. Ven y saborea la auténtica Riwwel Kuchen, donde cada bocado cuenta una historia de amor, esfuerzo y arraigo
El turismo y la gastronomía local han establecido una simbiosis que enriquece tanto a los viajeros como a las comunidades anfitrionas. En la provincia de Misiones, esta relación se manifiesta de manera especial a través de la recuperación de recetas tradicionales traídas por los primeros inmigrantes. Un ejemplo emblemático de esto es la Torta Ruso-Alemana, también conocida como Riwwel Kuchen. Este plato, heredado de los inmigrantes rusos-alemanes, se ha convertido en un símbolo de la rica herencia cultural y culinaria de la región.
Un Legado Culinario de Inmigrantes
Misiones, una provincia caracterizada por su diversidad étnica, ha sido hogar de innumerables colonos que trajeron consigo sus costumbres y tradiciones. Entre estos, los inmigrantes rusos-alemanes dejaron una huella profunda en la cultura local, especialmente en la gastronomía. Sus recetas, cuidadosamente preservadas y transmitidas de generación en generación, no solo ofrecen una ventana al pasado, sino que también representan una parte integral de la identidad cultural de la región.
La Torta Ruso-Alemana, o Riwwel Kuchen, es un ejemplo perfecto de cómo estas tradiciones culinarias han perdurado y se han adaptado a su nuevo entorno. Este delicioso postre, originalmente de la Rusia alemana, ha sido cuidadosamente mantenido por los descendientes de aquellos primeros colonos, quienes se esfuerzan por preservar su herencia cultural.
Turismo de Experiencias y Gastronomía
El turismo de experiencias viene ganado popularidad en los últimos años, y la gastronomía juega un papel crucial en este tipo de turismo. Los viajeros buscan cada vez más experiencias auténticas que les permitan conectar con la cultura local de una manera profunda y significativa. En este contexto, la Torta Ruso-Alemana se convierte en más que un simple postre; es una puerta de entrada a la historia y la cultura de los inmigrantes rusos-alemanes en Misiones.
La Receta de Torta Ruso-Alemana: Riwwel Kuchen
Ingredientes
Masa: 500 gr harina 0000. 250/300 cc leche. 30 g levadura fresca o 15 g levadura seca. 50 cc aceite de girasol. 100 g azúcar. 1 pizca de sal fina. 2 huevos. 1 cda esencia de vainilla
Cubierta: 300 g dulce de membrillo
Streusel (Cuca): 100 g azúcar. 100 g manteca- 120 g harina. 1 cdta de canela molida
Elaboración Masa:
En un bowl, colocar la harina y hacer un hueco en el medio. Añadir la leche tibia, la levadura, y la pizca de sal en los bordes de la corona de harina.
Dejar reposar hasta que la leche y la levadura espumen. Aparte, batir los huevos con el azúcar, el aceite y la esencia de vainilla.
Unir todos los ingredientes y formar una masa tierna. Amasar unos 5 minutos hasta que no queden grumos. Tapar y dejar leudar en un lugar tibio hasta que la masa duplique su volumen.
Desgasificar la masa y colocarla en una asadera enharinada de 25 x 35 cm con bordes de 5 cm de altura. Aplanar la masa con una cuchara mojada para evitar que se pegue.
Granulado Streusel:
En un bowl, mezclar todos los ingredientes y formar un arenado o grumos con las manos.
Montaje:
Colocar tiras de dulce de membrillo sobre la masa. Dejar levar por 20 minutos y, finalmente, agregar el streusel por encima.
Hornear a 180 °C por 30 a 35 minutos.
Una vez fría, cortar la torta en cubos y disfrutar con un mate, té o café.
La Importancia Cultural de la Gastronomía Tradicional
La preservación de recetas tradicionales como la Torta Ruso-Alemana no solo es una forma de mantener vivas las costumbres culinarias, sino que también fortalece la identidad cultural de las comunidades. Los hijos y nietos de los primeros colonos han redoblado sus esfuerzos para visibilizar y compartir su herencia cultural a través de la gastronomía. Esto no solo beneficia a la comunidad local, sino que también enriquece la experiencia de los turistas, quienes buscan autenticidad y conexión cultural.
En conclusión, la Torta Ruso-Alemana es mucho más que un postre delicioso; es un símbolo de la rica herencia cultural de Misiones y un testimonio de la capacidad de la gastronomía para unir a las personas. El turismo de experiencias, al enfocarse en la autenticidad y la conexión cultural, encuentra en estas tradiciones culinarias un recurso invaluable para ofrecer a los viajeros una experiencia única y enriquecedora.
Lic. Clara Sobotka, Cocinera. (Descendiente ruso-alemana), claryta.ale@gmail.com
PSS 05/07/2024